Os propongo una salida de fin de semana (2-3 noches) a nuestro país vecino: Francia.
Desde Girona o Barcelona la tenemos relativamente cerca, entre 100 y 200 km, nada que no podamos hacer en un par de horas como mucho.
En nuestro caso el destino fue el Camping des Albères situado en el pequeño pueblo de Laroque-des-Albères; reservamos un bungalow por un precio muy ajustado en el que estuvimos muy bien.
Salimos de casa y nos pusimos en camino: Ap7, A9 al entrar en Francia y salida en Le Boulou. En poco más de una hora estábamos en nuestro primer destino: el lago de Saint Jean Pla-de-Corts. En precioso lugar donde parar, comer unos bocadillos que llevábamos en la mochila y dar un tranquilo paseo al rededor del lago.
Los niños pueden correr, ver los patos que hay por allí y pasar un buen rato. Es un buen lugar para hacer actividades en verano, al inicio de la primavera está todo muy tranquilo y cuidado.
Tras desayunar y pasar un buen rato nos fuimos al camping, en 20 minutos has llegado.
Lo primero que hicimos fue visitar el pueblo de Laroque-des-Albères, ya que estábamos allí, que menos. Tiene un castillo desde el que se puede ver todo el pueblo, un pequeño supermercado, panadería, pizzería, restaurante, crepería, carnicería y algunos comercios más.
A 10 minutos hay un Carrefour que veréis por el camino, antes de llegar.
El camping tiene una piscina descubierta con tobogán pero también tiene una cubierta y climatizada. Aprovechamos la tarde para probarla.
Al día siguiente, por la mañana nos fuimos a hacer de turistas. Nuestro destino: Collioure, a 20 minutos.
Allí nos centramos en tres partes según nos recomendó la persona que nos atendió en la oficina de turismo: El casco antiguo: lleno de tiendecitas y galerías; un pequeño paseo por el puerto para hacer unas fotos y disfrutar de las vistas; y la visita al castillo Real de Collioure (2 euros la entrada, niños gratis).
Muy interesante, sobre todo el castillo.
Otras actividades que pueden hacerse son:
- Trenecito turístico
- Capilla de St-Vincent
- Visita al Fort Miradou
- Paseo en barco
En la oficina de turismo os darán toda la información que necesitéis. Preparaos para pagar parking porque es un pueblo muy turístico. Nosotros pagamos 4 euros por 3 horas (el máximo en la zona que aparcamos).
Una vez acabada nuestra visita decidimos ir a Argelès-sur-Mer, 15 minutos de trayecto. Comimos por allí y nos fuimos a la playa. El día fue espectacular y pudimos aprovechar muy bien todos los momentos.
Comer en toda la zona tiene su qué. El menú está entre los 20 y los 30 euros aunque siempre se pueden encontrar otras opciones más económicas: pizza, kebab, bocadillos, …
Para acabar la tarde, volvimos al camping y los niños aprovecharon la piscina descubierta.
El tercer día fuimos a ver la abadía de Saint-Gènis-des-Fontaines está a 10 minutos del camping, una pequeña abadía en la que pudimos ver el claustro y una exposición que hay en la planta superior. No visitamos la iglesia ya que era domingo de Semana Santa y estaba hasta arriba por la misa.
La tarde la pasamos en el camping, no hizo buen tiempo y, a pesar de habérsenos hecho pesada ninguna de las salidas, decidimos descansar. Los niños pasaron la tarde haciendo actividades y disfrutaron mucho.
Para cenar compramos unas pizzas en el mismo camping, vale la pena, están muy ricas y el precio es ajustado.
Al cuarto día recogimos y volvimos a casa con ganas de volver y descubrir otros sitios con la misma base, el camping des Albères en el que tan bien estuvimos.
Nota: Perpignan está a 30 minutos del camping.